Anoche fui con Craneo al evento bizarro de la noche, Blondie y el aniversario de Vampiros.cl. Llegue al metro ULA, y mientras me paseaba buscando a este personaje, se me acercan 4 goticos tapados en accesorios de la mas diversa indole, y me preguntan si acaso les puedo comprar las entradas, picoe'caballo pense yo. No estoy para huevadas y menos si aun no me reuno con mis colegas.Aparecio Craneo, todo un gentlemen, muy de camisa, pantalon y zapatos, con su marcial corte de cabello.Nos fuimos a una chicheria del lugar que reunia a lo mas variado de los comeprietas, precalentamos motores ranciando un rato al calor de unas chelas y pisco sour, y cuando estabamos a punto, nos lanzamos a la actividad vampirizadora.
El ambiente estaba cargado de los mas gotico imaginable, minas de blonda negra, weones disfrazados del cuervo, de maricones renacentistas, monjas fetichistas con las ubres al aire, y por supuesto, el plato fuerte, minas tapás en latex y tubos. Excelente.
Nos lanzamos a la pista "mas electronica" y empezamos a vacilar, el cerebro se golpeaba duro adentro del craneo con los beats de la oscuridad, de pronto craneo se pastabasea y se zarpa, no fue el alcohol, no fueron las drogas ni los "camaradas" presentes, simplemente se fue en una volá "hoy desperte con una lluvia de sangre y no se a cuantos mate", cosa muy propia de la gente que cultiva las MMA, en todo caso. Nos fuimos a la barra, a tomar piscolas, que por esos extraños motivos que desembocaron en mi sobrenombre, estaban increibles y de lo mas cargadas. Fue el efecto Psalm 69 creo yo, el toque Old School.
Por supuesto que paso de todo, desde ver gente rebotar olimpicamente, hasta guatonas tipo mekano de mezclilla y polera indigna, entre medio, unos weones picados a Fighters trataban de darnos jugo e intimidarnos, pero nosotros conservamos la compostura propia de una estrella del rock, preocupados mas de catar el ambiente y sus posibilidades. Cualquier error culminaria en un calabozo siendo sodomizados (en el mejor de los casos) por una Dominatrix en volá de rubber dong, y la veldá, para experimentos no estamos, una weá son los tabues como absolutos restrictivos del ser y otra, que una mina te lo meta.
Feindflug, Combichrist y otras yerbas se sucedian, de pronto anduvo cagando la noche, el Dj se puso medio cumbianchero y cago la wea, hasta que por fin se enciende nuestra noche al ritmo de Atari Teenage Riot. Me lance como un animal a la pista a dejar la cagá en grata compañia, perfecto.
Ademas, entre tanta frikiedad y hemoglobina ambiental, tuve el honor de conocer y departir con Delfin Quispe, si, el mismo de torres gemelas, y en cada ocasion que lo ameritaba, lanzaba su conocido y popular grito. Es un fuera de serie.
Ya cabros culiaos, chupenla con sangre escuchando Psyclon Nine.
